martes, octubre 31

# 58 Fuera de programa

Que bueno lo de Misiones !!!!

Que estén asustados unos días.

Que se tomen el trabajo de disimular un poco, solo un poco, su naturaleza ruin.

Yo no lo creía posible, por suerte me equivoque y en Misiones hoy están orgullosos pues demostraron que su dignidad no se vende.

lunes, octubre 30

# 57


  1. aguante la llama que llama!!!!
  2. estoy en la terna al pochoclo fierro, o tras el pochóscar?
  3. Ud. hace cada preguntas, no sera de una empresa de investigacion?
  4. lindo día para contradecirme Caracol...
  5. donde manda capitán... los marineros se sublevan
  6. más emparchados que bicicleta de pueblo (como la mía)
  7. Uuuuh que bardito se armó
  8. Mirá que hay gente que hace cada quilombo por un polvo eh...
  9. usted con el "Todavía" me cago el entierro

miércoles, octubre 25

# 56

Second chance –Veintinueve-

Nada escapa, nada muere,
nadie olvida, eso lo sé.

Los Pericos.

Es facil olvidarse del mundo al navegar, el viento sobre la cara, el ruido del agua corriendo bajo el casco, el viento atacando las velas.
La mirada atenta solo a las olas –de noche siempre amenazantes- en la proa.

Pero hoy nada logra arrancarle una sonrisa a Jaime, Carla no responde ni sus sms ni sus llamados, es preocupante pues no tiene manera de contactarla, ni sabe donde vive, ni cual es su auto, nada.
De repente se acuerda, él le dio su tarjeta, se fija en la billetera, la ve y tiene un celular.
La boyas del Mitre titilan muy cerca, aquí hay señal seguro.
Prueba suena espera, y nada.
Vamos de nuevo, ahora se escucha un hola dubitativo.
Es Guido…

Le va contando, el hombre pregunta poco pero da siempre en la tecla.
Después es Guido el que habla, nada tranquilizante. Ayer llevó los chicos a casa de un amigo, en un barrio de chacras en Chascomús, allí son todos amigos y tienen muy buena seguridad.
Por la noche un grupo de tipos en dos autos entraron a buscar los chicos, primero intentaron por las buenas y después el tema se puso espeso, hubo trompadas, y cuando vieron que perdían sacaron armas. El resultado, los chicos siguen en Chascomús, hay dos supuestos agentes de la SIDE muertos, tres heridos y tres esposados. Dos amigos de Guido con heridas leves, Guido con una costilla fracturada pero entero. Estuvo negociando con la SIDE para que las cosas queden en paz, pues a los agentes no les interesa –para nada- que se corra la bola que fueron derrotados por un grupo de “mariposones”. Parece que los gays no están bien considerados en las fuerzas armadas y los servicios. No deja de ser cómico el asunto.

Pero Carla tampoco le contesta las llamadas a Guido. Mas que preocupado esta con un terrible cagazo, él siempre percibió una veta jodida en Levy y Ella nunca le hizo caso.
Como Guido conoce la casa quedan en hablarse en una hora y media y coordinar el lugar donde encontrarse para ir a buscarla juntos. Jaime no quiere saber nada pero reconoce que Guido tiene razón, solo y sin armas no logrará nada. Guido irá con unos cuantos amigos con experiencia en el tema.

Jaime hace rumbo a CUBA, ya que cree que será una cuestión de suerte, no es posible que Levy tenga hombres para vigilar todos los clubes. Y queda cerca de la casa en Belgrano R donde debe estar Ella.
Entra solo con el foque, y va directo a la primera boya que ve libre, en un par de minutos deja las velas adentro y se prepara para irse. Escucha una lancha que se acerca y se esconde, ese motor no es de una lancha de club, es poderoso.
Por el tambucho vislumbra un impresionante lanchón negro con tres hombres a bordo, navegan lento mirando cada barco, buscando algo.
Obvio, buscan a Jaime.
Si no son en extremo boludos lo van a encontrar en un minuto.
Mientras contiene la respiración manotea unas bengalas sin saber bien para que pueden servirle. Por algún imponderable no le prestan atención a su barco, es evidente que no saben nada. Siguen la recorrida alejandose despacio, el ruido del motor se transforma en un ronroneo y finalmente calla, deben estar cerca de tierra desde donde pueden vigilar todo.

En ese momento llama el celular. Jaime por poco muere infartado, en la calma de la madrugada el sonido le parece estrepitoso, lo mas rápido posible contesta con voz queda.
Es Levy. Sin darle tiempo a replicar lo amenaza, lo insulta, lo apabulla. Su ira es palpable, nada tiene que ver con el sonriente y cordial tipo que estaba en la exposición.
La amenaza final lo deja helado, ¡ Vas a seguir a Carla a la tumba !
Después de unos segundos -mezcla de estupor y un dolor sordo y opresivo- le contesta, glacial.
Huí, escondete, buscá un ejercito, nada te va a servir, nada te va a proteger, no te van a alcanzar las balas para pararme. Al mediodía vas a estar muerto, te voy a desfigurar a trompadas, te voy a matar yo mismo. Voy a aplastarte, no es una promesa…es un hecho.

Corta. Sin detenerse a pensarlo demasiado se desnuda hasta quedar en calzoncillos, sigilosamente entra al agua y nada hasta llegar a la marina, cuidando que no se mojen las bengalas y el telefonito.
Desde allí va caminando erguido, sin esconderse, hasta llegar a donde estaban los matones fumando y charlando estupideces.
Los toma por sorpresa, al que tiene mas cerca lo arroja al agua mientras patea al segundo y le quema la cara con una de las bengalas al último.
Le saca el arma y dispara a quemarropa sobre los tipos hasta vaciar el cargador de la pistola.
En dos minutos, todos muertos. No lo siente.

Busca mas balas, le saca la ropa a uno, encuentra las llaves de un auto, se pone una campera y mientras habla con Guido camina a paso rápido buscando el auto.
Va a matar a ese hijo de puta, sin vacilaciones ni remordimientos. Casi con placer.
Esta vez tiene menos suerte con el auto, es un gol. Por lo menos hay un paquete de cigarrillos adentro.

Le lleva menos de diez minutos llegar a dos cuadras de la casa de Levy, un barrio poderoso en la ciudad, grandes casas, algunas mansiones, departamentos de lujo y mucha seguridad, es en Avenida De Los Incas al lado de la casa de los Yoma. Ambas casas compiten en tamaño y ostentación, la de Levy ocupa casi media manzana y tiene salida a dos calles.
Estaciona a una cuadra y espera a Guido que viene caminando con otro tipo de lo mas fiero que Jaime ha visto en su vida, da miedo. Guido los presenta, el tipo se llama Carlitos, en vidas anteriores fue policía, ladrón, secuestrador y cuando finalmente logró escapar de los confines de la droga, se transformó en un experto en seguridad.
Les da su visión técnica, en pocas palabras, de forma escueta pero clara.
Acaba de entrar Levy con no menos de 5 tipos, y no saben cuantos ya estaban adentro.
El método ideal les demandaría tiempo, hombres y armas que no tienen.
Va a tener que ser a lo bestia, por la parte de atrás de la casa y a los tiros salvajes.
Cojones y balazos.
Solo ellos, con la 9 mm que tiene Jaime, Guido un 32 y Carlitos una impresionante pistola 44 y una escopeta de mano.

Dan la vuelta, no quieren darse tiempo para cobardías, saltan el muro y se esconden tras una enorme tipa, se acercan a la casa separados, Jaime por el centro, Carlitos por la derecha y Guido cubriendo el otro flanco.
Puede que no los esperen tan rápido, pues llegaron al área de servicios sin que los detecten. O puede ser una trampa.

Cuando entran se desata una catarata de disparos, gritos, humo y pólvora.
Es una locura, van a morir todos.
Carlitos es un kamikaze muy efectivo y letal, su escopeta en espacios chicos es una maquina de destrozar, mata hiere e inutiliza a muchos de los hombres de Levy.
Luego de un rato se hace un tétrico silencio, interrumpido por alguna queja de los heridos.
No tienen idea de cuantos quedan, pero Jaime sigue avanzando cauto sin acusar recibo de la sangre que cae por su hombro izquierdo.
Al salir de la cocina son atacados por dos hombres -Jaime los reconoce, son los guardaespaldas de Levy en la exposición- que aciertan a Carlitos –queda tirado en un ángulo extraño- y a Guido.
Ríen al disparar y se jactan de lo facil que es matar a un puto.
Guido, con varias heridas, se arrastra callado sobre su sangre y hace blanco perfecto en la frente del hombre mas alto, en ese momento aprovecha Jaime y liquida al otro, limpiamente. -Siempre confunden putos con cobardes...

Levanta a Guido y siguen caminando, cuando llegan al escritorio que está junto al living quedan pasmados al reconocer a Carla, ensangrentada e inmóvil en el piso, contra una pared.

A Jaime se le aflojan las rodillas, pero Guido le aprieta un brazo con fuerza.
-Ahora no podes hacer nada, buscá a ese hijo de puta, matalo antes que te mate a vos, yo me ocupa de Ella.

Aún aturdido Jaime va hacia la escalera y sube lento, sigiloso y pegado a la pared –le quedó de una vieja película- atento al peligro.
Cuando está por llegar al descanso del primer piso ve el caño de una pistola y alcanza a reaccionar una fracción antes del estallido, le quema el cuello mientras se enfrenta a Levy, no es consciente de todo lo que sucede, solo son pantallazos, flashes que retendrá su memoria. La cara enajenada de Levy, la fuerza brutal de sus manos, la pistola bajando lentamente sin que pueda evitarlo hasta quedar entre sus ojos. El movimiento rabioso que hace, pues no puede morir sin hacer justicia.
Surgen fuerzas, libera una mano y con violencia, casi con crueldad golpea a levy en la nariz, sintiendo como crujen sus huesos y se afloja la presión sobre la pistola.
Consigue que la suelte y lo ahorca, furibundo.
Levy se libera y trata de encontrar la pistola, Jaime la levanta primero y la tira por la ventana haciendo añicos el vidrio.

En dos pasos esta frente a él, lo mira a los ojos y le dice,
-Cobarde hijo de puta, te avisé.
Le clava su vieja navaja marinera a la altura del corazón.
Ve, siente, como se apaga la vida en los ojos de Levy, y lo deja caer.
Un pequeño estertor y nada después. Es un cadáver.
Baja la escalera y va hacia el living.
Guido esta en cuclillas sosteniendo a Carla entre sus brazos mientras llora.
-Respira, es un milagro pero respira...todavía.

lunes, octubre 23

# 55




  1. No, si va a terminar siendo un libro de autoayudo esto...
  2. aguante la fonola
  3. Me voy para volver después
  4. ¿ si le buscamos una novia a Levy?
  5. por ahí se le escapó un "infeliz"
  6. cortala o te cago a trompadas,
  7. espero que mejore en el entierro...
  8. Le cambio una golosina por un beso...
  9. Si quiere le presento a mi ex marido
  10. A Ud. Caracolis, lo veo de lo mas punki.
  11. filá y llamame asesina
  12. Apuesto mis pochoclos a Carla,
  13. ¿alguién llamó a la ambulancia???

miércoles, octubre 18

# 54

Second chance –Veintiocho-

Para odiar hay que querer
para destruir hay que hacer
y estoy orgulloso de quererte romper
la cabeza contra la pared

Intoxicados


Levy está furioso, fuera de si.
Pocas veces se descontrola y cuando sucede es una explosión de furia ingobernable, cualquier cosa puede pasar, cualquiera puede morir, es un punto de no retorno.
Al leer el sms de ese infeliz se deja llevar por el odio, tira el celular al piso y lo patea desintegrándolo contra una de las paredes.
No es suficiente descarga, gira, en dos pasos se acerca a Ella y le da patadas hasta sentir que su enojo se diluye –un poco-.
Se aleja de Carla y se sienta en el living sin darse cuenta que mancha la lujosa alfombra con sangre. Repasa mentalmente las últimas horas.

Cuando Levy y Carla se conocieron, él –enamorado hasta la médula- se prometió mantener a Carla en su estado de pureza, mas tarde lo siguió haciendo. Su familia siempre estuvo fuera de “la empresa”, para todos ellos Levy era solo un hombre de negocios mas.
Era un enorme trabajo, de 9 a 19 era un cruel y sanguinario déspota criminal, tenía en sus manos vidas y almas de mucha gente, estaba siempre presente en la trastienda del poder, esquivando la verdad y la justicia. No solo mantuvo el discreto poder de su padre sino que lo eclipsó en mucho, eliminó a su principal competidor, rociando con gas mostaza la pequeña isla en la que veraneaba el brasileño. Con muy pocas bajas (el pueblito de pescadores vecino a la fazenda no llegaba a 100 habitantes) se adueño de la región. Aceitó contactos con la CIA, la ANS, y afianzó aliados estratégicos de Estados Unidos. Por eso lo apañaban y lo aceptaban como un mar menor frente a los zares de la droga colombiana.
Pero su casa era inmaculada, allí era el tipo mas amable, atento y cariñoso del mundo.
Jamás trabajaba en casa, solo era un esposo amoroso, un padre tierno, un hombre sensible, de buen humor, bromista. Era perfecto.
Se desvivió para hacerlo, el crimen se lleva mejor con la oscuridad de la noche, por lo que debió imponer el cambio de costumbres a gente dura. Valió la pena.
Era su oasis, solo con los problemas típicos de cualquier hogar, había imperfecciones pero era absolutamente estanco a su “otra vida”. Siempre fue así. Hasta que apareció el idiota este que destruyó todo eso en una noche. Pulverizó su “paraíso” dejandolo hecho trizas sin culpa ni conciencia.
Sin embargo no todo estaba perdido, lo mataría –obvio- e intentaría “reconquistar” a Carla como si nada hubiera pasado. Eso lo calmaría.
Entonces surgió lo imprevisible, de forma inesperada el tipito se las rebuscó para salir ileso de la explosión, capturó a dos experimentados agentes de la SIDE, lo dejó en evidencia con Carla, provocó un sismo de consecuencias inesperadas en su mundo y desapareció como si nada. Ni una huella del maldito y su familia.
Levy era una cobra herida sin víctimas a mano para envenenar.
Entonces llegó Carla. No se hizo la tonta, lo enfrentó, le recriminó su vida, sus secretos.
Como si tuviera derecho después de lo que había hecho la muy puta. ¿Ella traicionada?
Lo que lo desequilibró fue el anunció que no vería de nuevo a sus hijos, estaban a salvo y lejos de su alcance.
Cuando Levy le dijo que sabía con exactitud donde había escondido Guido a los chicos y que sus hombres los sacarían de allí ese mismo día Carla le dio un bife que lo aturdió. Lo que provocó su ira fue la mirada de odio y desprecio, su mujer no tenía conciencia del dolor, de la inmensa herida que lo desangraba. Tampoco tenía conciencia de lo sádico y violento que él podía ser.
Ante el primer golpe ella lo miró –extrañada- , no podía creerlo.
No trató de defenderse, solo huir. Pero la catarata de golpes y patadas la demolió, Levy siguió pegando hasta darse cuenta que Ella no se movía, ni se quejaba. Nada.

El sonido del celular hace volver a la realidad a Levy.
Ya saben donde está el tipo, van por él.
Ni siquiera se da vuelta para mirarla, para despedirse. Sale con apuro.
Es tiempo de cacería.
De muerte, destrucción, sufrimiento, dolor y sangre.
Es la hora de su venganza.

martes, octubre 17

# 53




1. algún pasado puede acecharte / asomarse
tendré alguna especie de deseo subliminal?!(de que me maten digo)
3. no me gustaría verme sometida a escarnio público.
4. Turkish, sos mi hermana gemela, boluda, nos separaron al nacer!
5. ...y con la calabró hacen un trio...
6. Cómo vivir tranquilo sin esperar pero despierto?
7. ¿Para cuándo el libro con nuestras inteligenteces instintivas???
8. no se los puede dejar solos que corre sangre???
9. Pobre Carla. Era tan pecosa. QEPD.
10. lo cotidiano es puro barro.
11. A lo mejor la culpa la tiene Almodóvar.
12. si está inerte está igual que yo sin mis anteojos.
13. ¿Cago fuego Carla?..
14. pegame y llamame Zorrita, dale, se bueno.
15. No sabia Caraculisss que eras un fiel discipulo de Migre.
16. digo boludeces en casi todos los idiomas conocidos...
17. yo ahora cebo mate y paso música en la fonola
18. A bailar a Go Go sin parar hasta noviembre,
19. me gusta andar descalza!!!
20. que parte de "no vendo mas pochoclos" no se entendio???

jueves, octubre 12

# 52


No parecía justo tantos post cuando te fuiste y ni uno solo por el regreso.

A festejar, Chirusa está de vuelta !!!!!
Aprovechemos antes que se mande un post serio y profundo !

miércoles, octubre 11

# 51

Second chance –Veintisiete-

Yo soy aquél que cada noche te persigue
Yo soy aquél que por quererte ya no vive
El que te espera, el que te sueña
El que quisiera ser dueño de tu amor
de tu amor

Yo soy aquél que por tenerte da la vida
Yo soy aquél que estando lejos no te olvida
El que te espera, el que te sueña
Aquél que reza cada noche por tu amor

Y estoy aquí, aquí para quererte
estoy aquí, aquí para adorarte
Yo estoy aquí, aquí para decirte que como yo nadie te amó

Yo soy aquél que por tenerte da la vida
Yo soy aquél que estando lejos no te olvida
El que te espera, el que te sueña
Aquél que reza cada noche por tu amor

Y estoy aquí, aquí para quererte
estoy aquí, aquí para adorarte
yo estoy aquí, aquí para decirte
Amor, amor, amor,

Raphael (interpretado por Damián Bolzoni)

Nota del autor: Jamás hubiera imaginado posible /escuchar una canción de este tipo, jamás. Pero uno crece y se sorprende día a día (¿?)

Jaime espera impaciente la llegada de la noche.
Su ansiedad lo está matando, lo lleva a cometer errores.
Decide mandarle un mensaje de texto a Carla, estima que no pueden rastrear el celular cuando es algo así, por lo menos en todas las películas muestran que se necesita un mínimo de tiempo. Tiene razón.

Pecosa:

Esperame, solo unas horas, voy por vos.
A rescatarte, a rescatarnos.
Sin vos no soy yo.
Hemos esperado tantos años sin saberlo, que ahora que nos sentimos, que no podemos negar lo que siempre supusimos, no debemos enloquecer.
Se que todo parece difícil, incluso imposible.
Lo único imposible sería vivir sin estar juntos, vivir muertos por dentro ya no es una opción.
Vamos a superar todo, si estamos juntos podremos enfrentar lo que sea.
Te amé, te amo y te amaré toda mi vida. Ahora lo se.

Jaime.


Levy lee el SMS en el celular de Ella sin inmutarse, glacial.
Carla yace en un rincón, inerte.
Ahora odia.

lunes, octubre 9

# 50



Hoy, pese a algunas excepciones -siempre bienvenidas- pintó mas serio...

  1. Muchas veces uno clama por esa magia tan especial que tienen algunos momentos y no entiende cómo hay gente que no sabe de qué se trata.
  2. Yo siempre he respetado la vagancia.
  3. Las batallas contra uno mismo casi siempre sacan lo bueno
  4. Me mato ahora o espero al lunes que viene ?
  5. La hiperkinesis hace estragos en los caracoles.
  6. Abrazo, medalla y, er, apretón de manos...
  7. Carajo... siempre me va mal en los concursos de popularidad
  8. Quedaba medio traba le voy a decir así todo pintadito.
  9. Cuando usted se sienta "tenso",ya sabe chifle...
  10. El amor no se elige, creo que el amor lo elige a uno/a y creo que hay que luchar contra viento y marea por el amor. A remar marinero....
  11. Lástima que estas cosas solo funcionen en la vida de otro. A mí me darían un patadón y me escondía en la Villa 21.
  12. El matrimonio es como un gran cubo mágico: un misterio casi imposible de resolver
  13. Si no estás seguro de que te guste el juego. No jueges.
  14. En la vida no hay rewind.
  15. De esas decisiones, de esos momentos uno no sale indemne nunca.

jueves, octubre 5

# 49

Second chance –Veintiséis-

No se que quiero pero se lo que no quiero,
se lo que no quiero, y no lo puedo evitar,
puedo seguir escapando y aun lo estoy pensando,
lo estoy pensando pero estoy cansado de pensar;

Andrés Calamaro.


La fuerza de las mareas es increíble. Predecibles pero incontrolables.
Jaime está perdido en sus pensamientos, enfrentando y tratando de dimensionar la fuerza de las corrientes ocultas muy por debajo de las calmas aguas de la superficie.
Ana no le habla, está “durmiendo” con los chicos, pero el mensaje de sus ojos cuando escuchó toda la historia fue durísimo.
Está dolido, con culpa pero concentrado en ponerlos fuera de peligro.
Cuando su mente divaga, siempre toma el mismo rumbo: Carla.
Una encrucijada nada fácil para cualquiera, agravada por el reguero de muerte, maldad y violencia que rodea el mundo de Levy.

Vuelve a la realidad, va a tener todo el día para reflexionar, ahora no puede dejar de estar alerta.
Se muere de ganas de fumar, pero en la penumbra -solo interrumpida por los destellos de las boyas del canal- hasta la brasa del cigarrillo puede ser delatora.
No ha perdido su exactitud, Conchillas está a la vista y aún resta hora y media para que el cielo empiece a aclarar.
Si bien no cree que vigilen ese puerto no quiere correr riesgos, en pocos movimientos baja la mayor y la hace firme a la botavara, con el foque tendrá suficiente velocidad pero será mas sigiloso.

Para alguien mas “novato” sería casi imposible entrar al arroyo de noche y sin motor, pero Jaime prácticamente aprendió a navegar ahí.
Distingue la forma difusa de la escollera y el barco hundido que asoma apenas entre las aguas unos metros mas al norte.
Se pasa unos cien metros del barco y vira a estribor hasta hacer proa directa a la puerta del almacén cuya tenue luz amarillenta se distingue bien, cuando solo faltan quince metros vira a babor y navega perpendicular a la orilla hasta distinguir la pequeña desembocadura del arroyo, se pasa veinte metros y enfila la proa directo hacia el estrecho cauce. Entran, Jaime no pierde sus mañas, ni siquiera tocaron arena.
Los árboles le restan fuerza al viento, igual se las ingenia para seguir con poca estropada y en absoluto silencio hasta pasar el club.
Tira el fondeo por la popa y corre, dejar caer el foque y de un salto llega a la orilla, allí evita que el barco toque y hace firme el cabo a un árbol. Son invisibles desde río abierto y desde la ruta también, perfecto.
Le dice a su mujer – su mujer ?- que no salgan del barco, él volverá en no mas de media hora.

Camina hacia la ruta y en la bifurcación hacia el pueblo lo esperaba –justo donde debía- una camioneta con un par de hombres menos sombríos de lo que él esperaba.
Pocas palabras, saludos sin sonrisas ni compromiso, se sube van al barco a buscar a los demás.
Diez minutos después estaban ya en la ruta saliendo del pueblo rumbo a una pequeña pista privada a pocos kilómetros en donde los esperaba un avión de Franchesco en el que se irían del país.

Cuando llegan, mientras los hombres cargan las pocas valijas Ana se aparta con Jaime.

- Adonde vamos ?
- Franchesco dijo que en Cerdeña ni siquiera un tipo como Levy lo puede desafiar.
- Esto que te voy a decir es al pedo, es obvio que vas a volver a Ella…
- Ana…
- NO ME INTERRUMPAS, por favor ! Ya bastante difícil es hablar esto para mi. Tenés que elegir, ahora. Si subís al avión no será un lecho de rosas recomponer lo nuestro, pero podemos hacer el esfuerzo. Si te quedas acá, cerrarás una puerta que no se abrirá nuevamente. Otro día no golpees, estará cerrada.
Es tu decisión
, yo voy a estar en el avión.

El beso, frío e impersonal, y una mirada cargada de odio, de resignación por tantos años junto a él para descubrir que nunca fue realmente amada.
Podía perdonar la traición, pero no la indiferencia y el rechazo de su alma.

Ya está todo dicho. Jaime se toma su tiempo para hablar con los chicos, abrazar a cada uno y prometerles que pronto se verían.
Tuvo que hacer fuerza para no llorar frente a ellos.

Despegar no les lleva mas que diez minutos, ya el rugir de las hélices no se oye, el pequeño avión es un puntito perdido en el cielo que empieza a aclararse. Sabe que en dos horas estarán en una pista secreta en Brasil haciendo un trasbordo al Lear que los llevaría directo a Cerdeña.

Ellos están a salvo, pero Jaime está (y estará) torturado eternamente, sigue mirando el cielo aunque ya no hay nada.

Prende un cigarrillo –por fin- y camina hacia el arroyo, el regreso hasta el barco por allí será largo y dificultoso, pero se asegura que nadie vea a un extraño en el pueblo.

No tiene apuro, recién al amparo de la noche puede regresar a Buenos Aires.
Durante todo el día pensará como hacerle frente a Levy.
Tiene que hacerlo.
Por él.
Por ella.

martes, octubre 3

# 48





La cueva del caracol se complace en presentar una “fija” para todos los lunes, para despistar... empiezo un martes. (Ayer estaban cerradas las reservas).

Escribir me gusta, por eso lo hago.
Pero las sonrisas y las carcajadas en general son provocadas por los comments, esas enigmaticas bifurcaciones del post que hace que tome un rumbo inesperado y cobre vida propia.
Por eso seleccionaré con un criterio incoherente los comments que mas me gusten y los publicaré los lunes, y algún martes también.

Saludos.


• Hay infidelidades e infidelidades...
• Esta la tenés que vender como la novela que remplazará a Montecristo en año que viene.
• Alguna teta tiene que haber.
• A veces soy más paciente (pocas).
• Me gusta temblar, y que me hagan silencios entre la sangre y la piel.
• Me pinta la compasión.
• Después de mucho tiempo Ud. se acordó de Ud...
• Ya me veía *mujer-araña-al-agua* de una
• La próxima no te va a quedar otra que invitar.
• Cura los hongos y el mal aliento
• Con lo que ando necesitando olvidar.
• Quién le quita lo navegado!! (y lo olvidado)
• Mira que hay cosas que sería mejor olvidar...
• Mas limado de lo que ya estoy difícil que quede
• Para cuando un tour por el Paraná de las Palmas???
• No me gusta que me desafien!!!!
• Dejemos los halagos generosos para más adelante.
• Me habré equivocado al pensar que JAIME era un nabo?
• Aia... El "Te llamo" entonces no significa nada??? Ufa!!!
• Y no se equivoque que no quiero más de cualquiera...

lunes, octubre 2

# 47



“Al final de nuestra vida terrenal no somos juzgados por los títulos conseguidos, el dinero ganado o los cargos logrados. Somos juzgados según hayamos sido capaces de brindarnos a nuestros semejantes”

Ni idea el autor.

Como dije el otro día en lo de Malizia, hay gente que le pone una dosis de magia a su vida y -por suerte- también a la mía.

Gracias.